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Proyecto Exit Salida
Por Alejandro Zuy
Ua idea curatorial que convoca a escapar, a disfrutar de un rito de pasaje, de una transición, a integrar antes que a dispersar.
Símbolos, íconos, sellos, logos, señales...: estímulos que organizan, identifican, disciplinan, estimulan. Exit/Salida juega con la ambigüedad de todo ese universo verbo - gráfico que forma parte de nuestra vida cotidiana desde que las metrópolis se constituyeron en el centro de actividades del mundo. Exit/Salida recupera, retroalimenta y proyecta hacia el futuro una idea curatorial que convoca a escapar, a disfrutar de un rito de pasaje, de una transición, a integrar antes que a dispersar. Es un primer principio generador en donde las obras son causas múltiples de otras por venir.
Exit/Salida también es transitar primero por aquella parte de la ciudad en donde los anacronismos parecen exhibirse con toda naturalidad a los visitantes para después ofrecernos, ya en el interior de la Barraca Vorticista, un nuevo mapa, un itinerario que se inicia con un interrogante precisamente de lo urbano a cargo de Ezequiel Verona y con la hipnótica tecnología disfuncional de Leonello Zambón. Más adelante, los desoladores y enmohecidos síntomas apócrifos de las fotografías de Guido Ignatti confrontan con la imaginería cinematográfico televisiva asimilada por Gabriela Pino. Tanto los Simpsons como el Shrek que ella presenta remiten a Jeff Koons pero metabolizados en clave criolla.
Valeria Traversa se acopla a la propuesta con los enérgicos grafismos que componen su serie de cartografías inciertas, e inmediatamente después, un exiguo pero efectivo rojo sobre blanco sobre más blanco deslumbra en base al humor ácido que forma parte de las criaturas que componen la obra de Mara Riviello López, tal vez el hito más sobresaliente del itinerario planteado.
El final está destinado a la pintura, allí el toque onírico está presente en los trabajos de Natalia Biasioli y Matias Perego que contrastan con las geometrías expandidas de Jimena Fuertes y con la pared de reminiscencias de Diego Mur que funciona como un espejo que distorsiona las coordenadas de tiempo y espacio pero que resume de manera eficaz el proyecto de Victoria Piazza.
Exit/Salida no abruma ni escamotea, usufructúa el espacio de exposición en la medida adecuada, respeta la noción de proyecto asumida desde su primera edición y va por más.
Publicado en Leedor el 11-05-2010
